Por: María Margarita Espases.
Con más de 20 años de experiencia, Carlos Andara Vallone se ha convertido en un referente en el mundo de la tecnología automotriz. Su carrera comenzó desde lo más básico: el taller. Allí aprendió que los detalles hacen la diferencia y que cada vehículo cuenta una historia única. Desde entonces, su pasión por la reparación y restauración de automóviles lo ha llevado a dominar todo el proceso, desde la evaluación inicial hasta el acabado final.
Carlos no solo se ha especializado en pintura avanzada y reparación estructural de carrocerías, sino también en estimación de daños, preparación de superficies y gestión de líneas de producción. Su experiencia técnica es tan completa que abarca desde el reemplazo de piezas y eliminación de abolladuras hasta la igualación perfecta del color y el pulido final que devuelve al auto su brillo original.
Uno de los aspectos más destacados de su carrera ha sido su labor como ajustador de seguros, una experiencia que le dio una perspectiva única: entender no solo los daños visibles, sino también lo que hay detrás de cada siniestro. Esto le ha permitido ofrecer soluciones precisas y realistas que combinan calidad, seguridad y eficiencia.
Además de su trabajo práctico, Carlos también ha sido formador y facilitador, compartiendo sus conocimientos en diplomados y programas especializados en control de calidad y liquidación de siniestros automotrices. Su formación académica la recibió en el Instituto Universitario de Tecnología Industrial (IUTI) en Caracas, Venezuela, una institución reconocida por su enfoque técnico en el área automotriz.
Hoy, Carlos Andara continúa aportando al sector, no solo con su experiencia, sino también como autor. En 2025 escribió su libro «Un camino pintado de esfuerzo», donde narra sus vivencias y aprendizajes, y también escribió un manual técnico especializado en reparación de carrocerías con materiales compuestos modernos. Su historia es ejemplo de cómo la pasión, el conocimiento y la dedicación pueden transformar una carrera en una verdadera vocación.